Vallekas Denuncia

Por su interés os facilitamos el comunicado que ha lanzado Izquierda Unida sobre la situación de una zona infantil.

ZONAS INFANTILES SIN COLUMPIOS NI SUELO PERO CON BASURA Y EXCREMENTOS

Madrid, 18 de octubre de 2011.- Zonas infantiles sin columpios ni suelo acolchado pero llenas de basura y excrementos, supuestos zonas verdes plagadas de matorrales, alcantarillas sin tapa o bloqueadas por los desperdicios, abandono y desidia generalizada por parte del Ayuntamiento de Madrid en el, paradojas de la vida, lo que iba a ser el ‘ecobarrio’ de Vallecas.

Hace más de cuatro años, en concreto tras la Junta de Gobierno del 21 de junio de 2007, el alcalde de Madrid, Alberto Ruiz Gallardón, se deleitaba en explicar ante los medios de comunicación el novedoso y transgresor proyecto medioambiental que convertiría las colonias vallecanas de San Francisco Javier y Nuestra Señora de los Ángeles en un ‘ecobarrio’ puntero y envidiado por Europa y el mundo entero. Ayer mismo, fecha a la que pertenecen las fotografías, su estado daba fe del ‘éxito’ sin precedentes de esta joya del ecologismo urbano.

El repaso a las declaraciones del equipo de gobierno sonroja. En 2009, en el marco de una Comisión Informativa, la delegada Ana Botella se recreaba en los “beneficios medioambientales” que reportaría este barrio a sus vecinos. La realidad es que las viviendas no están construidas pero hay gente que vive, o mejor dicho malvive, en ese entorno rodeada de suciedad y basura que, como evidencia los testimonios gráficos, no es de un día ni de dos.

En este escenario de total abandono, la portavoz de Medio Ambiente de Izquierda Unida, Raquel López, recordó hoy en la Comisión que Botella comprometió una "gestión inteligente que programase un mantenimiento preventivo". “Pues bien, a día de hoy, no encontramos un atisbo de inteligencia en lo que es un barrio sobrepasado por la basura en la que los vecinos y vecinas conviven a diario con situaciones de verdadera insalubridad. Es una vergüenza el panorama que se encuentran los niños a la entrada, por ejemplo, del colegio Eduardo Rojo o la escuela infantil Nuestra Señora del Campo donde los menores ya están acostumbrados a ver un paisaje de suciedades y basuras”.

“Es increíble, añadió, que hace dos años el alcalde nos impusiese la tasa de basuras y eso se haya traducido en que pagamos más pero se limpia menos. El enorme recorte que se está ejecutando en los servicios públicos de la ciudad es una realidad que, por ahora ya se ha materializado en mil barrenderos menos y en calles llenas de basura”.